“Dicen que en la obra, se oye un rumor,
que el Aliensote anda loco de amor…”
Desde la obra hasta San Luis lo conocen,
al Aliensote, que se cree patrón,
siempre pregunta si vino el Pipope,
ese morrito le robó el corazón.
Dicen los compas que anda trabado,
ya ni camina si no ve al cabrón,
cuando el Pipope llega temprano,
el alien sonríe y se pone chingón.
Ay Aliensote, deja el vicio cabrón,
por andar de borracho, te dieron un golpón,
en el bar de San Luis, te tumbaron el pantalón,
por andar querendón… y perder la razón.
El Pipope aprendió del Capibara,
ya trae las mañas del viejo ladrón,
le roba el alma al que se le para,
pero con Miriam… ahí no pegó.
El alien jura que fue destino,
que en otra vida ya se lo ligó,
por eso siempre que llega el turno,
va preguntando “¿ya vino o no?”.
Ay Aliensote, qué amor tan cabrón,
el Pipope ni te pela y tú con devoción,
ya ni la obra te aguanta, con tanta emoción,
y la banda te grita: ¡ya suéltalo, don!
“Dicen que lo vieron pisteando en San Luis,
con el casco chueco y los ojos tristes…”
— “¡Viva la Virgen de Guadalupe, compas!”
— “Pero que no se agüite el Alien,
que el amor también pega duro en la construcción…”
Ya se hizo leyenda entre los obreros,
que el aliensote perdió la razón,
que entre varillas, tabiques y fierros,
anda buscando al de su ilusión.
El Pipope ríe, le da su avión,
y el Capibara mira con traición,
pues su aprendiz ya trae su historia,
y el aliensote su maldición.
Ay Aliensote, deja el drama cabrón,
que el amor de obra no tiene perdón,
ya ni la Kenia te fía, ni el Olla el camión,
pero en el fondo, tú sigues con pasión.
“Así fue la historia, del Alien y el Pipope…”
“Uno robó corazones… y el otro, estimaciones.”
Produccionesss Ollaaaaa
Firicontrol Records